La Secretaría de Energía, encabezada por Flavia Royón, ha tomado esta decisión debido a una disminución en los costos de generación eléctrica. El Ministerio de Economía, a través de la resolución 884 publicada en el Boletín Oficial, ha aprobado los precios mayoristas de la energía para el próximo verano. Estos precios habían sido elevados por la compañía que administra el mercado eléctrico (Cammesa).
En términos prácticos, esta reducción del 9% se traducirá en una disminución del 8% en las facturas de electricidad a partir del 1 de noviembre. Los beneficiarios serán aquellos usuarios que no cuentan con subsidios y que han estado pagando el precio completo de la energía. Esto incluye a los Grandes Usuarios (consumidores con una potencia superior a 300 kW) y a las familias residenciales N1 que no están registradas en el sistema de subsidios (RASE) debido a sus altos ingresos o decisión personal de no inscribirse.
Además, aquellos usuarios de ingresos medios bajo la categoría N3 también se verán beneficiados. Aunque cuentan con subsidios, cuando exceden ciertos niveles de consumo (más de 400 KWh/mes), deben pagar el precio completo por el excedente. Será en esta parte donde experimentarán la rebaja en sus facturas.
Es importante destacar que la tarifa social seguirá subsidiada y no sufrirá aumentos. Esta medida busca garantizar que los hogares más vulnerables no se vean afectados por la reducción en las tarifas.